Un paseo por las Haciendas de Aguascalientes
Sé testigo de la maravillosa historia de nuestro país a través de un paseo por las Haciendas de Aguascalientes.
La entidad hidrocálida ofrece una gran diversidad de haciendas, entre ellas algunas edificadas en el siglo XVI.
Muchas de estas edificaciones conservan la magia que les dio fama, gracias a un gran trabajo de restauración que les ayudó a mantener la esencia con la que fueron construidas.
Las haciendas en Aguascalientes hoy albergan eventos sociales, gastronómicos y culturales, que dan cuenta de la historia de ese Estado.
Hacienda de San Blas
Ubicada en el Pueblo Mágico Pabellón de Hidalgo (municipio de Rincón de Romos), hoy da cabida al Museo de la Insurgencia, un recinto dedicado a mostrar la historia de nuestra Independencia.
Recientemente la UNESCO la nombró “Patrimonio Cultural de la Humanidad”, ya que forma parte del Camino Real de Tierra Adentro.
Hacienda el Saucillo
Data de finales del siglo XVI y fue testigo en su momento de la historia del Camino Real de Tierra Adentro. Está en el municipio de Rincón de Romos, a 30 minutos de la capital del Estado.
Aún conserva parte de su sistema hidráulico, por ello se puede apreciar el sorprendente acueducto de 164 arcos de punto medio y una longitud de 1200 metros. Actualmente está en restauración para volverse un producto turístico y cultural.
Hacienda de Letras
Edificada en 1854, es uno de los principales destinos enoturísticos por sus recorridos por viñedos y su gran variedad de vinos. Enclavada en Pabellón de Arteaga, la Hacienda de Letras cuenta con variedad de experiencias en torno al vino para que los visitantes disfruten de una buena cata, recorridos por los viñedos y la naturaleza que rodea la hacienda.
Hacienda Garabato
Fundada a principios del siglo XVIII, la Hacienda de San Isidro de los Garabatos (como se le conocía a sus inicios), es obra del arquitecto Refugio Reyes Rivas. Fue de las primeras a nivel nacional en contar con ganado de toros de lidia y figuró durante años como una de las principales ganaderías de reses de lidia de todo el país.
Su nombre se debe a la hierba espinosa que abunda en la región llamada “garabatillo”.
